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Si Sanson perdió la gracia por revelar un , ¿cuántas tendré yo perdidas por revelarte mi pecho?

El que con grande eficácia de las mujeres se fia, no dudo sea ignorancia que puede perder la vida si Sanson perdió la gracia. Dice cualquiera discreto que el callar es de hombre fino, eso mismo yo penetro, que una vez perdí un cariño por revelar un secreto.

Las mujeres son fingidas, ingratas de corazón, si las gracias son sabidas tal vez por esta razón, ¿ cuántas tendré yo perdidas ? Los dos en brazos estrechos unidos con el amor, nos miramos satisfechos, mas te perdí, ¡ qué dolor ! por revelarte ini pecho.

Una doncella afiigida decía con alta voz : sacadme de ser doncella ,

Virgen y Madre de Dios.

¡Con qué llanto llamaría á la Madre del señor ! teniendo poca alegría lloraba con gran dolor una doncella afligida. Siempre estoy rogando á Dios que me conceda un esposo que no sea un hombre atroz, que sea bien cariñoso, devia con alta voz.

Lloraba con grande pena al verse tan afligida, v mirando las estrellas, deci a: Virgen María, sacadme de ser doncella. Siempre estoy llamando á Y que me concedáis la gracia así lo dice mi voz, para que sea casada, Virgen y Madre de Dios.

Una rosa muy hermosa le decía al dios Cupido : ten piedad , rey del amor , de este cuerpo desvalido.

No soy Esther prodigiosa, ni tampoco Abigail, ni Raquel, aquella diosa, pero soy del gran jardin una rosa muy hermosa. ¿Por qué me habéis oprimido? romped la dura cadena, no tile pongáis en olvido aliviad, señor, mi pena, le decía al dios Cupido.

No comprenden mi dolor los sabios medicinantes: vo vov perdiendo el color «j «7 X y me muero por instantes; len piedad , rey del amor. A vecqs pierdo el sentido y no hago mas que llorar; solo la salud le pido para poder disfrutar de este cuerpo desvalido ,