cl Caudillo que gobernará à mi Pueblo de Israel. En¬ tonces Herodes llamando en secreto à los Magos , se informo de ellos cuidadosamente del tiempo en que les apareció la estrella , y encaminándolos à Belen , les dixo : Id è informaos bien del Niño, y quando lo hu¬ biereis hallado , hacédmelo saber , para que yo tam¬ bién vaya à adorarle. Ellos luego que esto oyeron del Rey, se fueron, y he aquí, la estrella que habian visto en el oriente, iba delante de ellos , hasta que llegando, se paró - sobre donde estaba el Niño. Y quando vieron la estrella, se regocijaron en gran manera.-Y entrando en la casa, hallaron al Niño con María su Madre, y postrándose, le adoraron ; y abiertos sus tesoros, le ofrecieron dones, oro, incienso y mirra. Y habida res¬ puesta en sueños, que no volviesen á Herodes, se vol¬ vieron à su tierra por otro camino.“ Hasta aquí la his¬ toria de San Mateo. Llegado pues el tiempo de la purificación de Ma¬ ría , según la ley , se encaminó con su Niño Tesus en los brazos al templo, sin embargo de que María no estaba obligada à este rito, por ser madre en todo di¬ versa de las otras mugeres ; y aunque fuese purísima, no rehusó enumerarse entre las demás mugeres in¬ mundas , como nos dixo el Cardenal Hugo. La historia de la purificación refiere San Lucas por estas palabras : Después que fueron cumplidos los dias de la purificación de María según la ley de Moy- sés, llevaron al Niño Jesus à Jerusalen para presen¬ tarlo al Señor, como está escrito en la ley del Señor: Todo macho que abriere matriz, será consagrado al * Se-